En un cambio inesperado, la Fiscalía solicitó este martes 19 de noviembre 36 meses de prisión preventiva para Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), por presuntamente liderar la organización criminal “Los Galácticos” y otros delitos graves. Sin embargo, pocas horas después, Lozano y dos altos funcionarios de la FPF fueron puestos en libertad tras una decisión de la Quinta Sala Penal de Apelaciones.
La Corte Superior Nacional oficializó la resolución que revocó la orden de detención preliminar contra Lozano y otros implicados, quienes permanecieron detenidos desde el 7 de noviembre. El tribunal concluyó que no existían «razones sólidas, ni siquiera mínimas» para justificar la privación de libertad del dirigente.
La abogada de Lozano, Giuliana Loza, confirmó que este continuará desempeñando sus funciones como presidente de la FPF, declaro que “La Quinta Sala ha reconocido que los agravios que presentamos eran válidos. En ningún momento debió haber sido privado de su libertad.»*
Aunque Lozano y los otros liberados podrán afrontar su proceso fuera de prisión, la investigación por parte de la Fiscalía continúa. Este giro ha generado críticas y expectativas en un caso que involucra acusaciones de corrupción y gestión irregular en el fútbol peruano.
La continuidad de Lozano al frente de la FPF añade tensión a una institución ya golpeada por escándalos recientes, mientras se cuestiona la transparencia en su liderazgo. El caso será determinante para el futuro del balompié nacional y la lucha contra la corrupción en el deporte.
