Ministro del Interior prohíbe a los policías que acudan a funeral del presunto feminicida

Tras la confirmación del fallecimiento de Darwin Condori Antezana, principal sospechoso del feminicidio de Sheyla Cóndor, el ministro del Interior, Juan José Santiváñez, declaró que el agente no recibirá ningún tipo de homenaje póstumo debido a sus antecedentes criminales, incluyendo una denuncia previa por violación. Además, prohibió a los efectivos policiales asistir a su sepelio bajo amenaza de sanciones. 

Santiváñez fue enfático al señalar que cualquier policía que desobedezca esta instrucción será pasado automáticamente al retiro: «No se le rinde ningún honor. Ningún policía asiste a su sepelio. Penosamente no lo encontramos con vida, porque lo hubiéramos sometido a la justicia.»

El ministro agregó que el operativo de búsqueda incluyó la intervención de 26 hoteles en San Juan de Lurigancho, culminando con el hallazgo de Condori suspendido en una habitación. Fue trasladado a una clínica donde se certificó su fallecimiento. 

Si bien las primeras investigaciones apuntan a un suicidio, Santiváñez confirmó que no se descarta la posibilidad de un asesinato. Las autoridades están investigando las circunstancias del hallazgo. 

El caso ha provocado una fuerte indignación pública, no solo por el crimen cometido, sino también por el hecho de que Condori era miembro activo de la Policía Nacional del Perú (PNP), a pesar de tener denuncias previas por violación. Este hecho reaviva las críticas sobre la falta de filtros efectivos en las instituciones encargadas de proteger a la ciudadanía. 

El Ministerio del Interior busca desvincularse completamente de la figura de Condori, resaltando la necesidad de reforzar controles internos para evitar que agentes con antecedentes criminales sigan formando parte de la PNP. Este caso expone las graves fallas en el sistema y deja en evidencia la urgente necesidad de reformas.