El crimen, perpetrado por sicarios en moto, es investigado por la Policía Nacional, que no descarta un nuevo caso de extorsión en el sector transporte.
El sector transporte vuelve a ser golpeado por la violencia. Esta vez, Jonathan Silva Padilla, conductor de 32 años perteneciente a la empresa Emptonsa, también conocida como 11 de Noviembre, fue asesinado a balazos la noche del viernes cuando retornaba al paradero de su ruta ubicado cerca de la entrada de Punchauca, en el distrito limeño de Carabayllo.
Según fuentes de la Policía Nacional del Perú (PNP), el crimen fue ejecutado por dos sujetos a bordo de una motocicleta, quienes interceptaron la unidad de transporte público y abrieron fuego al menos tres veces, impactando directamente contra la cabina del conductor. Uno de los proyectiles alcanzó a Silva Padilla, quien quedó gravemente herido dentro del vehículo.
A pesar de haber sido trasladado de urgencia al Hospital Sergio Bernales de Collique, los médicos confirmaron su fallecimiento minutos después de su ingreso, producto de la gravedad de las lesiones.
Agentes de la División de Homicidios y Criminalidad Organizada acudieron al lugar del ataque para iniciar las investigaciones. Durante la inspección preliminar del bus, se descartó la presencia de notas extorsivas u otro tipo de mensaje intimidatorio.
Sin embargo, la hipótesis de un ataque vinculado a mafias de extorsión no ha sido descartada, especialmente porque la empresa Emptonsa opera en rutas que han sido blanco recurrente de amenazas criminales, como la Carabayllo–San Luis. Esta línea ya había sido señalada previamente como una de las más vulnerables frente al accionar de organizaciones dedicadas al cobro de “cuotas” a choferes y cobradores.
