Este miércoles 23 de octubre, miles de trabajadores de diferentes sectores bloquearon la Panamericana Norte en una masiva protesta contra la ola creciente de extorsiones y la inseguridad que afecta al país. La marcha tiene como destino el Congreso, con el objetivo de exigir al gobierno que tome medidas urgentes para garantizar la seguridad de los negocios y de la ciudadanía en general.
Entre los manifestantes, muchos provienen del mercado Unicachi y se han unido a otros gremios y comerciantes de distritos como San Martín de Porres e Independencia. Los participantes, vestidos con camisetas de la selección peruana y utilizando ollas, sartenes y cucharones para hacer ruido, han mantenido una actitud pacífica, mientras son escoltados por efectivos de la Policía Nacional del Perú (PNP). Incluso, algunos ciudadanos han mostrado su solidaridad entregando botellas de agua a los manifestantes.
Así mismo, los Comerciantes de Puente Piedra también se han movilizado desde su distrito, uniéndose a la protesta que tiene como principal demanda que el Congreso y el gobierno atiendan sus necesidades de seguridad.
El objetivo común es exigir al gobierno una acción inmediata frente a la creciente criminalidad, marcada por extorsiones y sicariato. Las protestas buscan, además, presionar al Congreso para que archive proyectos de ley vinculados al terrorismo urbano y derogue la ley contra el crimen organizado. Los organizadores han advertido que, si no obtienen respuestas satisfactorias del Ejecutivo y el Legislativo, las manifestaciones podrían intensificarse en los próximos días.
